El propósito del trabajos de reflexión es resumir tus impresiones del curso o del seminario en varias páginas cortas. Estos trabajos contestan a tres preguntas básicas: Qué, Quién y Cómo. En tu introducción, expresas el qué has aprendido: los temas principales del curso, nueva información que has adquirido y las teorías introducidas por el profesor. La mayor parte del trabajo es dedicado a explicar por qué lo que has aprendido es importante y valioso. Finalmente, la conclusión demuestra cómo el curso te ha impactado, y cómo vas a utilizar el material en el futuro.
Aunque los trabajos de reflexiones finales a menudo se plantean para estudiantes y profesores como una forma de evaluar el éxito del curso, reciben ocasionalmente una nota o forman parte importante de la nota final; un trabajo de reflexiones personales para demostrar la comprensión del estudiante respecto al significado del curso. Asimismo, indican su posible aplicabilidad a los estudios del estudiante, sin memorizar una lista de datos del material de estudio. Más aun, si planeas obtener futura interacción con el mismo profesor, sea como instructor en un curso futuro, un consejero durante tus proyectos de M.A. o hasta como un supervisor de Ph.D, un complementario y bien-escrito trabajo de reflexiones puede ser el primer paso hacia una colaboración fructuosa.
Nuestro equipo te puede asistir en escribir un trabajo bien articulado que transmite el significado del curso y su importancia para tu futura carrera académica, sin usar frases usadas, clichés e indicaciones de que no hayas prestado mucha atención al curso.